Para aquellos interesados en el disfrute pleno con la naturaleza, en el km 95 de la ruta 3, a dos km de la ciudad de San José de Mayo, se encuentra la Picada Varela, lugar agreste de monte indígena y playa donde descansa el río San José.
Ese amigable espacio natural forma parte del veraneo de muchos maragatos que escapan del calor del pavimento durante los meses más intensos. Las actividades que se pueden realizar varían y son abiertas a la imaginación de quienes visiten el lugar.
En período de temporada alta, el parador que allí se encuentra, abre sus puertas para los que quieran tomar algo fresco o llevar a los pequeños de la familia a darse un lindo chapuzón en una de sus dos piscinas.
Los caminos del lugar son ensombrecidos por el monte indígena que allí descansa. En el recorrido comprendido en ese predio existen sectores con parrilleros donde muchas familias aprovechan para deleitarse con un rico asado.
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